viernes, 3 de julio de 2009

Crítica de 'La Última Casa a la Izquierda'


A continuación podres leer la versón extendida de la crítca que escribi para esta mierda, digo película. Con más cosas que la que puse en filmaffinity, espero vuestros comentarios queridos lectores.






Por lo general nunca he tenido prejuicios con los remakes. Me encanta 'Amanecer de los muertos' porque respeta ' Zombi' y se adapta al nuevo público. El remake de 'La Matanza de Texas' era una versión descafeinada y para jóvenes en busca de emociones fuertes totalmente falta de algo interesante, pero después de 'La Matanza de Texas 2' todo es válido.
Y tampoco afronté el remake de 'La Última Casa a la Izquierda' con prejuicios. Me senté relajadamente a ver la película y a los cinco minutos sentí curiosidad para ver que otras cosas había hecho el director. Y bueno, mi sospecha se confirmó, su primera película en el mercado americano. Se nota desde que se presenta a la protagonista que el material le queda grande al director, no sabe por donde agarrarlo.

La música, por su parte, podrían habérsela ahorrado. Una sucesión de melodías arrítmicas que ni acompañan a las imágenes, ni ayudan en ningún sentido. Ni siquiera pega con la acción porque en todo momento la música mantiene el mismo ritmo. Aunque hay que tener en cuenta que era difícil de superar la composición musical mezcla de pop, psicodelia y country de la película original.

El guión divaga en busca de dar un enfoque diferente a la historia de Wes Craven, pero al final acaba en el mismo punto. Hay momentos en los que no sabes que te quiere contar. Es como si la película fuese alguien que a los 13 años aún no ha aprendido a hablar. Es decir, le miras incrédulo y haces todo lo posible por entenderle, pero es imposible.
La narración pierde mucho tiempo contando cosas sin importancia y otras que son relevantes se tratan muy por encima.

En cuanto a la violencia de sangre y tripas que es lo que hará que muchos quieran ir al cine a verla. No es tanto como uno pueda imaginar, teniendo presente el nuevo estándar que se permite hollywood. La versión original era como 'La matanza de Texas' de Hooper, más violenta en el recuerdo de lo que se ve realmente. El punto fuerte de la versión original de 'La Última Casa a la Izquierda' era la secuencia en el bosque con las humillaciones a las que los criminales someten a las chicas. Porque el tema se trataba de una manera muy cruda, sin concesiones y sin pausas. En el remake se vuelve aburrido, y eso que la secuencia es más corta.

Lo que peor se ha hecho en esta versión ha sido pretender ser diferentes de la película de Craven. La original tenía muchos elementos que la hacían diferente. La música que he mencionado antes, un humor tan negro que si te reías te hacía sentir culpable y una libertad, derivada de la ingenuidad, que sólo se puede conseguir en una primera película. Se eliminan todos los aspectos que hicieron diferente la película de 1972 y la convierten en un vulgar slasher totalmente vacío de contenido, de interés o de cualquier cosa medianamente atrayente para el aficionado al cine de terror.

De las peores cosas que he visto son el personaje de Phyllis llamada Paige en el remake. La buena idea de la película original era que Phyllis era más mayor que Mari Collingwood y que es una chica un tanto vaga. En la nueva película Paige es una chica de la misma edad que Mari además de una eficiente trabajadora de supermercado. No es algo importante pero el matiz de una chica que trabaja a otra que no, cambia las suspicacias de los padres hacia esa chica. Y al ser una joven trabajadora, pierde fuerza el personaje.

El otro personaje importante es Junior, hijo del "malo" Krug. Que en el remake se llama Justin. Uno de los mejores momentos de la película original es cuando Krug, al saber que su hijo le va a traicionar le obliga a suicidarse, demostrando lo influenciable que es ese personaje, aunque antes en la película muestra su maldad. En el remake Justin es "el novio que todas las madres quieren para sus hijas" que atrae a Mari y a Paige a su habitación de hotel a venderles droga, pero sin mala intención. Y que al final ese personaje no muera se carga un punto de giro muy importante.

Y luego está la propia Mari Collingwood que al intentar huir de sus captores recibe un disparo en el hombro pero sobrevive. Al contrario que en la película original (aunque fue un cambio en montaje, que los señores Collingwood encontrasen a su hija muerta) Mari sobrevive y llega a rastras a su casa (que es la última casa a la izquierda del título que en el remake se recalca mucho eso, sin ningún sentido) Y para justificar que alguien con una bala en el hombro pueda seguir nadando después de haber sido violada, al principio de la película vemos lo buena nadadora que es Mari. Y bueno, somos espectadores profesionales y aceptamos como posible cualquier cosa, pero si se hubiesen estrujado un poco más el seso al escribir el guión se hubiesen ahorrado ese punto tan flojo y vergonzoso. Ya que a rasgos generales el guión parece escrito según un manual de “escribe tu primer guión para largometraje con ejemplos y dibujos”.

Krug pasa de ser un hombre muy malo, asesino en serie sin escrúpulos. A ser el discípulo aventajado de Jason. Sobrevive a todo, tiene una fuerza descomunal y parece más un modelo que un asesino despiadado. Aunque eso no le impide que no se asuste en ningún momento. El Krug de la película de Craven daba muestras de autentico terror cuando el padre de Mari se le acercaba con una sierra mecánica, pero ahora ni apuntándole con una pistola se amedrenta.

Y por último, la secuencia final. Torpe, mal rodada y que no tiene ningún sentido. Al principio de la película los padres que Mari se quejan de que el microondas no funciona. El padre de Mari intenta arreglarlo pero parece que se da por vencido. Al final después de certificar la muerte de Krug de un golpe en la cabeza, todo parece que ha terminado. Pero no, el padre de Mari, que es medico, ha engañado a su mujer para darse una fiesta privada con Krug. Lo ata a una mesa y coloca su cabeza cerca, aunque no metida del todo, del microondas estropeado. En menos de dos minutos le explota la cara a Krug, la cámara se mueve para no regodearse mucho en el estropicio (y conseguir una buena nota en la MPAA) y se termina.

En definitiva; si a una comedia negra le quitas la comedia sólo te queda lo negro y para lo que han hecho con este remake, más les valdría haberse ahorrado los dólares.