viernes, 27 de mayo de 2016

Crítica de 'El infierno verde'

Director: Eli Roth
Guión: Eli Roth, Nicolás López, Guillermo Amoedo
Interpretes: Lorenza Izzo, Ariel Levy, Daryl Sabara, Kirby Bliss Banton, Magda Apanowicz, Nicolás Martínez, Aaron Burns.

Sinopsis: Un grupo de estudiantes universitarios viajan al amazonas para protestar por la tala indiscriminada de árboles. Su acción reivindicativa detiene la deforestación y causa un gran revuelo en las redes sociales. Durante el viaje de vuelta a casa, sufren un accidente de avión y caen víctimas de la tribu a la que intentaban salvar, que les confunden con los obreros que están destrozando su hábitat.

Su hubiera que definir 'El infierno verde' con una palabra, ésta sería "decepción". Si hubiera que definirla con dos utilizaría "gran decepción". Han pasado muchos años y mucho tiempo de espera hasta que finalmente se le ha permitido al público ver 'El infierno verde' fuera del circuito de los festivales. Tanto tiempo que a su director, Eli Roth, le dio tiempo de hacer otra película; 'Toc Toc'. La cual vi antes que la obra que nos ocupa, y me pareció catastrófica en el sentido más peyorativo posible. Con lo que, cuando me dispuse a adentrarme en esta historia de terror y aventuras ambientada en el amazonas, sentí miedo. No un miedo primario a ser comido por caníbales, sino un miedo cuaternario y muy problema del primer mundo de aburrirme muchísimo. Profecía auto cumplida o no, eso es lo que acabó ocurriendo.

 Lo primero que chirria de forma escandalosa son los diálogos y las interpretaciones. Son de una falta total de frescura, como hecho por un quinceañero para un proyecto del colegio en el que no tiene ganas de participar. Mientras veía la película, todos los pequeños guiños y referencias a cosas que acaban ocurriendo más tarde en la película (la esencia del cine de terror es crear premisas que se cumplen, ejemplo clásico: una maldición) pero a los 13 minutos, tantos guiños resulta ser una estrategia narrativa muy pobre. En cuanto a la interpretación, lo siento mucho por Chile, pero sus actores están a la altura de los de teleseries españolas. En general, las interpretaciones son de primer curso de arte dramático de una escuela con muy poco prestigio. Llega tener un tono muy rancio de parodia y de ridiculez en los diálogos y las reacciones de los personajes que resulta abrumadora Aunque la escena cuando van a mear resulta graciosa, eso se lo concedo.
También hay que reconocer que la secuencia de la llegada al pueblo es brillante, de libro en todos los sentidos, y  la primera muerte gráfica mostrada en todo su esplendor de cámara digital te revuelve las tripas.
Llegado este punto durante la película , ésta se resume con dos escenas de muerte. La del rubio sin nombre al que le mata la hélice del avión , estúpida y fuera de lugar, y la de una chica que se cae de un árbol, graciosa y que tiene un efecto de alivio cómico. La película está constantemente acertando en la dirección por la que ir, pero equivocándose, terriblemente, dos minutos después, y eso es mala señal.
¿Por qué a la mayoría de los supervivientes del accidente de avión les lanzan dardos somníferos y a otra la matan en el acto con flechas como puños? No tiene ninguna explicación delante de la cámara, de modo que aunque esté documentado como un método tradicional de caza entre tribus caníbales, o lo que sea. lo considero un error de guion.
Cuando finalmente se van cumpliendo las premisas planteadas durante el primer acto, no sorprenden. Pero he de reconocer que la revelación de que uno de los personajes intentó suicidarse en el pasado es remarcable por la forma por la que dicho personaje muere.

Por otro lado, la fotografía y el diseño de producción acierta enormemente. Especialmente reseñable es el contraste entre el intenso verde de la naturaleza frente a las pieles pintadas de rojo de los caníbales. Y aunque gran parte de la narración transcurre con los protagonistas atrapados en una jaula, el clima es tenso y terrorífico, como una pesadilla.

Lo que se desvía mucho del sendero es la música. Suena a proyecto experimental sin ningún propósito, no tiene entidad propia para una historia de aventuras ni de caníbales, absolutamente genérica y no pega en absoluto con el ambiente. Pero claro, siendo obra de un compositor español no es de extrañar, ya que esto ocurre en todas , absolutamente todas, las películas españolas de los últimos 15 años.
En resumen, la película es muy irregular, el final intenta pasar por un homenaje a 0Canibal Feroz, pero es una copia flagrante. Y el epílogo está muy fuera de lugar. No logro entender como ser humano, que los eventos se desarrollen de esa manera tan anti natural.. Desgraciadamente esta película junto a  'Toc, Toc' (y no olvidemos que 'Hostel 2' tampoco estaba en buena forma) no hacen más que confirmar que la carrera de Eli Roth, no es que esté acabada, sino que nunca llegó a empezar. Y, Eli Roth, ¿podrías dejar de meter con calzador referencias a elementos modernos de tecnología y de estilos de vida?  Sabemos que sabes lo que es Uber, sabemos que estás en Twitter, vale, lo entendemos eres un tío moderno y enrollado, y no un viejo judío que duerme con su saquito de oro.


PUNTUACIÓN: 3/10